Una mirada. Una sonrisa.

Esto lo escribí ya hace bastante tiempo realmente la cosa ha cambiado mucho.





Con la luz nos encontramos a nosotros mismos. No cerremos los ojos para no vernos hay que abrirlos para encontrarnos, y una vez que sepamos quienes somos podemos empezar a descubrir lo que hay en nuestro alrededor, podemos empezar a saber, podemos empezar ha hablar, siempre teniendo claro quienes somos, que no pertenecemos a nadie ni a nada, que solo vivimos en este, nuestro mundo. El cual pertenece a todas las personas que están con los ojos abiertos, el cual pertenece a todo el mundo que quiere conocer lo que hay a su alrededor, el cual pertenece a todo el que busca y a la vez encuentra una persona o una cosa que le haga sentirse bien, que le haga sonreír durante todo el día, que sea diferente, que no tenga ninguna preocupación con lo que quiere hacer aunque los prejuicios de esta nuestra sociedad de ojos cerrados no lo recomiendan, yo aun con los ojos a medio abrir recomiendo que hagamos lo que queremos hacer y no nos escondamos al hacerlo, que descubramos como poder ser felices, que descubramos como vivir a gusto, que hagamos lo que nos apetece hacer en cada momento sin pensar si las consecuencias convienen o no a esta sociedad, tenemos que hacer lo que creemos que es bueno, tenemos que dejar de tener prejuicios, por una sociedad mandada por gente con los ojos cerrados, tenemos que empezar a ser felices, tenemos que empezar a sonreír, esta sociedad no nos tiene que coaccionar y hacernos sentir mal, tenemos que ganar a esta sociedad, tenemos que ser diferentes, si la sociedad nos da la espalda tenemos que sonreír a su espalda para que ella misma vea que no nos desanimara en nuestro proyecto de ser felices, si nos caemos nos tenemos que levantar, si nos hacemos daño tenemos que llorar sonriendo, tenemos que seguir con nuestra brigada de abrir los ojos para poder sonreír, aunque las cosas nos sean adversas, aunque nademos a contracorriente, aunque vivamos solos delante de 200millones de personas que nos dan la espalda, y quieren que dejes de sonreír, conseguiremos ser diferentes, conseguiremos sonreír.

Yo a veces también me e caído y e dejado de sonreír, es mas ayer me caí y deje de sonreír. Pero esta mañana e decidido ser feliz aunque las cosas no salgan como quiero que salgan, aunque las cosas sean a mi parecer un tanto adversas aunque sea difícil seguir sonriendo cuando te encuentras solo, seguiré intentando sonreír, seguiré intentando ser diferente cuando aunque mi sonrisa no sea recíproca, seguiré mirando la cara de un niño el cual no tiene preocupaciones y siempre sonríe para poder seguir sonriendo a la adversidad, no quiero desmoralizarme quiero seguir intentándolo quiero poder ser feliz quiero sonreír todo el día sin importarme que a los demás no les guste que te dirijas a ellos con una sonrisa, me da igual seguiré sonriendo sin importarme las consecuencias seguiré haciéndolo aunque me digan que no lo haga, quiero evitar la pregunta de si te encuentras mal, quiero que la respuesta sea clara sin realizar la pregunta. Lo siento para quien no le guste pero seguiré sonriendo, seguiré siendo feliz.






Una semana después de escribir esto, me siento feliz siento como que las cosas han cambiado siento como si mi idioma a mejorado siento como si la gente que en un principio estaba de espaldas se a dado la vuelta, me ha mirado, se ha puesto ha sonreír y me ha hablado. No se si se puede cambiar las cosas de un día para otro, pero a mi me a sucedido, cuando llego al trabajo no solo me sonríen los niños sino también mis “jefes”, ahora me siento aceptado, me piden consejo y ayuda para las actividades, me animan para que proponga mas actividades, me dan cada vez mas responsabilidad y mas libertad de actuar.