Cansado, ante la atenta mirada de alguien que con su mirada no acusa sino escucha, sus oídos es su vista y es capaz de describirte cualquier situación con una simple escucha. Era capaz de decir que pájaro era simplemente escuchando el batir de sus alas, la especie de perro escuchando las vibraciones que dejaba al andar.
Esta peculiaridad no deja de sorprender solo pensando que llevaba 45 primaveras sin poder ver, sin necesitar ver. Es fácil de explicar, si te quitas los zapatos y andas sabrás perfecta mente si pisas cemento, hierba o arena, esta sensación deductiva la anula tu cerebro al verla con la vista, se supone que no te hace falta.
Las peculiares proezas de este hombre llegaron a un grupo de científicos quienes estudiaron su caso, y tras unos años le llamaron y le dijeron muy ilusionados.
Señor hemos encontrado un remedio para su ceguera, usted si quiere podrá recuperar su vista!
A lo que el viejo ciego contesto: No, no quiero recuperar mi visión. No quiero perder el único sentido que me queda, el de las sensaciones, el que la vista te roba!.
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